Entras en tu establecimiento favorito para realizar tus compras y de repente, suena esa musiquita que te sabes de memoria y eres capaz de tararear. Esa musiquita corta, directa y reconocible identifica de manera inmediata el lugar en el que te encuentras. Se trata del jingle.
Un jingle es un mensaje publicitario cantado. Generalmente en el jingle se nombra la marca o establecimiento y el eslogan que lo identifica o el mensaje que se quiere transmitir.
Los jingles publicitarios tienen su origen en Estados Unidos en la década de 1920, y nacen justo a la vez que las emisoras de radio. En un principio eran cantados a capela por un coro musical, sin instrumentación de fondo y más tarde comenzaron a elaborarse pequeñas piezas musicales instrumentadas y cantadas. Suelen tener una duración de entre 10 segundos y un minuto, no siendo recomendable una duración mayor, ya que lo que se persigue con la creación de un jingle, es crear un identificador sonoro lo más directo posible; que conecte con el cliente y que éste, lo identifique de inmediato… casi al segundo de comenzar a sonar.
Muchas veces se utilizan músicas conocidas y ya compuestas (por ejemplo temas musicales de artistas del momento), para la creación de un jingle. Tan sólo se cambia y adapta la letra con las necesidades del anunciante o empresa. De esta forma se asegura que el jingle sea muy efectivo, al conocer el oyente de ante mano la música y saber tararearlo. También se crean jingles desde cero, componiendo la música de forma exclusiva. Son posiblemente los jingles de más éxito y que más se imprimen en la memoria del que escucha.
Hay dos tipos fundamentales de jingle;
El jingle identificativo, consistente en una ráfaga musical corta y que sirve básicamente para identificar la emisora de radio o local comercial.
El jingle publicitario, que tiene como función anunciar un producto o servicio. Generalmente es de mayor duración que el identificativo.
En Motiva hemos realizado jingles para diversos clientes, que ven como los que visitan sus comercios, identifican y tararean sus pequeñas piezas musicales, creando una imagen de marca única.