Imagina que entras en un comercio. Una óptica, por ejemplo. Necesitas unas lentes de contacto o quizás unas buenas gafas de sol para disfrutar de la playa este verano con total protección. Te acercas a la óptica qué está cerca de tu casa, abres la puerta y… un silencio te recibe.

Entras en un espacio sigiloso, como si molestaras, como si fueras a despertar al dragón que cuida del tesoro. El mostrador te espera al fondo, mientras divisas a una dependienta envuelta en su bata blanca colocando unas gafas en uno de los expositores.

¿Qué está pasando? ¿Hay algo que enturbia tu experiencia en esta escena? Efectivamente. La falta de música y ambientación sonora al entrar en la tienda te hace sentir incómodo y extraño. Imagina ahora por un momento que además de ti, en el local hay más gente esperando a que llegue su turno para ser atendido. El silencio solo es interrumpido por algún carraspeo o tos nerviosa.

El ambiente extraño que se puede llegar a generar donde las personas se encuentran prácticamente calladas y no hay música en el ambiente puede ser bastante agobiante.

Y es que además de mover emociones en nuestro interior, la música es capaz de convertir un momento de compra en algo más que eso: en toda una experiencia.

Imagina ahora que tienes una óptica y quieres acabar con ese silencio y que la experiencia de compra sea lo más agradable posible para tus clientes.

¡Aquí entra Motiva en acción!

Hay un asunto fundamental que hay que saber afrontar: no se puede contentar a todo el mundo. La gente tiene diferentes gustos y tu óptica va a ser un punto de encuentro de gente de gustos y edades diferentes. ¡Que no cunda el pánico! Vamos a analizar algunas claves para que la ambientación musical elegida sea todo un acierto. En primer lugar, vamos a diferenciar por tipos de ópticas:

• En una óptica que se mueve entre el concepto de óptica clásica pero también tiene algunos elementos más modernos, vamos a ir a por lo seguro: una música rítmica y que anime la espera, puede ser una buena opción. Canciones conocidas y éxitos que todos reconocemos de todas las épocas puede ser una buena combinación.
• En una óptica más clásica donde posiblemente tengamos una clientela de mayor edad, quizás lo ideal sería una selección de música ambiental, sin llegar a ser la que suena en un spa, pero sí una música instrumental donde el saxo, el piano o la guitarra sean los instrumentos protagonistas, con ritmos suaves y agradables que relajan antes de ser sometido a una exploración por máquinas de todo tipo.
• Cada vez más surgen conceptos de ópticas más modernas. Ambientes actuales e incluso atrevidos que llaman la atención de un público objetivo joven que busca la moda en las gafas y no tanto la corrección de su vista. La música entonces deberá ajustarse a parámetros donde la electrónica, lo indie y las últimas tendencias puedan mezclarse para hacer que la clientela sienta que la ambientación musical está acorde con el espacio en el que se encuentran y generando además una sensación de exclusividad y de éste es mi sitio, que indudablemente va a conseguir que tu óptica se convierta en punto de referencia para un púbico concreto.

Sea como sea, en Motiva tenemos servicios musicales y soluciones tecnológicas especiales para tu óptica; desde lo más clásico a lo más vanguardista. Además, ponemos a tu disposición herramientas de marketing que conseguirán informar a tus clientes de productos y ofertas, que colaborarán a aumentar las ventas de tu negocio: mensajes publicitarios. Algo que hasta hace poco tiempo sólo estaba al alcance de grandes empresas que podían anunciarse en la radio, ¡ahora a tu alcance gracias a Motiva!