Desde hace unos años, algunas de las principales plazas de nuestras ciudades (especialmente aquellas con vegetación espesa y altos árboles) ha cambiado su paisaje gracias a las numerosas y vistosas bandadas de estorninos que anidan en ellas, buscando alimento y refugio. Los estorninos son posiblemente uno de los vertebrados más números del mundo, gracias a la gran capacidad de adaptación que tiene esta especie de pájaro. Su omnivorismo le posibilita explotar una gran cantidad de recursos alimenticios. Su conducta gregaria le otorga una gran protección frente a los depredadores naturales, ya que moverse en bandadas le protege ante un peligro que se avecina y posee una gran capacidad de habituarse a cualquier cambio que suceda en su hábitat.
La acción del hombre en los bosques mediterráneos, ha causado que estas aves que se mueven en grandes números durante su hibernación, anide en zonas urbanas y rurales, causando todo tipo de molestias: ruidos, suciedad y destrozo en los cultivos de todo tipo. Este hecho ha sido determinante para que ayuntamientos de toda España, se pongan manos a la obra para ahuyentar a estas bandadas de pájaros, que en muchos casos están protegidos. Es por ello, que no se utilizan métodos de exterminio a causa de veneno o utilización de aves rapaces. Diversos estudios del comportamiento de esta especie en concreto, han dado con la solución ideal para espantar a estas bandadas de los núcleos urbanos: la utilización del sonido. Ya no es raro pasear por las plazas antes invadidas por esta especie al atardecer buscando alimento, y escuchar sobre nuestras cabezas extraños ruidos. Como si un pterodáctilo sobrevolase nuestras cabezas. Nada más lejos de la realidad. Se trata de la instalación de altavoces escondidos en los árboles, que emiten una serie de sonidos destinados a ahuyentar a las aves.
Y es que pese a su gran capacidad de adaptación, los estorninos no se acostumbran al sonido. Pero ¿qué tipo de sonido se utiliza? Los estorninos se comunican entre sí cuando hay un peligro en el ambiente, con unos sonidos en particular. Son estos sonidos de aviso de peligro los que se emiten a todo volumen desde los altavoces, mezclados con sonidos de los depredadores naturales de estas especies; el halcón, el gavilán y el águila. Se utilizan secuencias cambiantes para que los estorninos no se acostumbren a determinados patrones de sonidos y sean realmente efectivos.
En Motiva nos han requerido una acción anti plaga en las últimas semanas. Uno de nuestros clientes nos ha solicitado ayuda para acabar con una plaga de estas aves, que anida en los almacenes al caer la noche. Utilizando nuestro sistema de emisión online programable, y el equipo de sonido instalado en el almacén, estamos intentando colaborar para acabar con esta situación. La música que durante el día y las horas comerciales anima a los trabajadores del almacén, da paso a sonidos de aves rapaces al llegar la oscuridad. Una forma más de adecuar el hilo musical de toda la vida, a las necesidades de los tiempos modernos, sean estas cuales sean.
