Imagina que entras en una tienda en busca de algo que necesitas. El espacio es amplio, y algunas personas deambulan por el local mirando en estanterías. Intentas divisar a alguien para que te atienda, pero no logras ver a nadie. Sólo oyes las pisadas de las pocas personas que allí se encuentran. El silencio reina en el lugar. Hay un ambiente extraño, como de vacío… y decides irte. Ahora trata de imaginar que entras en ese lugar. Una música suena de fondo. Reconoces la melodía y comienzas a tararear. Observas a personas buscando lo que necesitan en las estanterías. Te adentras en la tienda y en el fondo ves a alguien en un mostrador. De pronto, una voz cálida suena en la tienda. Atención señores clientes, hoy pueden encontrar todos nuestros artículos a mitad de precio. De pronto olvidas a por ese artículo concreto que habías venido a comprar y comienzas a fijarte en las estanterías, mirando los precios…
Este ejemplo puede parecer simple e incluso inocente, pero es la realidad misma. No es lo mismo un negocio sin hilo musical, que con él. Por un lado, la música, acaba con el silencio incómodo de los establecimientos. Además, la música juega un papel mucho más importante que el de acabar con el silencio. Puede hacer que el cliente identifique un tipo de música concreto con el negocio en cuestión. Las tiendas de moda juvenil, suelen incitar a la compra con música muy movida y actual, donde la gente joven se siente «en su espacio». Un restaurante italiano, puede amenizar el almuerzo con música romántica italiana. Una vez más, el cliente identifica el ambiente musical con el negocio. Además, la música puede tener un ritmo diferente en determinadas horas; puede ser suave en los momentos de menos afluencia y más rítmica en las horas punta.
La personalización con jingles y cuñas publicitarias, mantienen informado al cliente de una forma más directa. Muy probablemente muchos compradores potenciales pueden mirar el cartel que contiene una determinada oferta de importancia. Pero puedes estar seguro, que si oyen ese anuncio, habrás llegado al 100% de la clientela presente en el local.
Todos estos factores y muchos más, son los que contemplamos en Motiva, para la realización de un hilo musical personalizado. Estudiando la mezcla perfecta para satisfacer las necesidades de cada cliente.
Un hilo musical es mucho más que música que suena por unos altavoces.
Es nuestra pasión.