Todos hemos pasado alguna vez por ese momento de temor, tensión, y ansiedad a la hora de afrontar alguna experiencia que consideramos que nos puede causar un daño físico o mental. Una de las más habituales suele ser la “temida” visita al dentista.
A pesar de que la tecnología en el campo odontológico ha avanzado bastante, mucha gente ha llegado a desarrollar fobia dental. Ya sea por el estridente sonido del taladro, o por el miedo a sufrir un daño físico.
Atrás quedan esas imágenes de hace más de un siglo en las que los cirujanos sangradores (como eran llamadas las personas que se ocupaban de tales menesteres) se dedicaban a extirpar los dientes o muelas conflictivas sin uso de anestesia, y con herramientas rudimentarias como el famoso hilo atado al pomo de una puerta.
Hoy en día, la odontología ha avanzado a pasos agigantados y el uso de anestesia y técnicas apenas producen sensación de dolor o molestia en los pacientes. Pero continúa habiendo una gran aversión a las sensaciones que todavía se producen cuando tenemos la boca abierta con un aspirador de saliva en un lado y en el otro el/la dentista rascando la dentadura con unas herramientas que producen un fuerte ruido más propio de una radial o un taladro.
Como ya hemos visto y hablado en más de una ocasión, la música es una herramienta estimulante muy poderosa, que puede de tanto activar nuestro sistema físico y neuronal, como ayudar a relajar nuestra mente y cuerpo.
Es por esto último por lo que, tras numerosos estudios, se llegó a la conclusión de utilizar la música como método para relajar y reducir o eliminar el estado de ansiedad que nos produce el acudir a la consulta del dentista.
Son muchos los odontólogos y dentistas los que utilizan música relajante dentro de sus consultas, para “aliviar” el dolor que pueda sentir el paciente. Incluso hace un tiempo, mencionamos en nuestras redes sociales el caso del odontólogo Fernando González que usa música en vivo. Una idea innovadora que, aparte de relajar al paciente a través de la música, brinda una oportunidad diferente a los músicos.
La opción musical más y mejor valorada ha sido la música clásica ya que sus notas y acordes musicales proporcionan un estado de relajación más profundo y estimulan la liberación de endorfinas y serotonina las cuales son las moléculas que se encargan de favorecer nuestro estado de relajación y felicidad.
Pero hay otras opciones igual de válidas y positivas para conseguir la liberación de estas preciadas moléculas de la felicidad y relax.
Podemos optar por acordes latinos con un tempo bajo y con letras sencillas, para así distraer en cierta forma a nuestra mente, con el tarareo de los estribillos pegadizos y conocidos.
También podrían tener cabida los conocidas covers, que consisten en canciones de gran repercusión y conocidas a escala global (grandes éxitos de ahora y siempre), versionadas por otros artistas, con un ritmo y tempo más pausado, que conseguirían el efecto deseado: relajar y distraer la mente (y el cuerpo). En nuestro catálogo de canales puedes escuchar una muestra de ellos.
Sea cual sea tu elección musical, en Grupo Motiva te ofrecemos la posibilidad de contar con tu propio hilo musical, adaptado a las necesidades de tu negocio o empresa. De esta forma, tus clientes y/o empleados afrontarán la vida con la mejor de las sonrisas.